El sistema, desarrollado por Ford en el Centro de Investigación e Innovación en Alemania, se basa en unos faros LED dotados de un sistema dinámico que permite ajustar la intensidad, el alcance del haz de luz, y el ángulo de dirección, en siete posiciones diferentes.
Además de este sistema dinámico, la tecnología de iluminación de Ford trabajará con el sistema de reconocimiento de imágenes para detectar peatones, ciclistas, animales… que se encuentren en nuestra trayectoria. Una vez detectados, los iluminará con mayor intensidad y advertirá al conductor de su presencia mediante un aviso y su identificación visual en el equipo de entretenimiento, a modo de pantalla de visión nocturna.
Finalmente, Ford también acompañará este sistema con las ventajas del GPS. A través de éste, el vehículo recibirá la información presente en la cartografía del navegador y, con esta información, será capaz de ampliar el haz de luz en cruces y rotondas de forma automática.
Todo un sistema pensado para mejorar nuestra visibilidad al volante y, por ende, nuestra seguridad y la de los que nos rodean.