La Corte Internacional de Arbitraje ha dado por terminada la alianza entre Suzuki y Volkswagen, firmada en 2009, por la que ambos fabricantes buscaban reforzarse mutuamente.
El fallo de la corte permite a Suzuki recomprar el 20% de las acciones que hasta el momento estaban en manos del Grupo Volkswagen, como parte del acuerdo que se firmó en 2009.
Dicho acuerdo buscaba reforzar a ambos fabricantes en el mercado a través del posicionamiento del grupo nipón en los países emergentes con sus vehículos compactos, y aumentar así su presencia en Europa, América del Sur y China.
La alianza contemplaba además que Suzuki tendría acceso a la avanzada tecnología medioambiental de Volkswagen, sobre todo en el campo de los vehículos híbridos, algo que según el fabricante japonés no ha ocurrido.
Dicho incumplimiento de los términos de la alianza movió a Suzuki a iniciar un procedimiento ante la Cámara de Comercio Internacional en 2011 para concluir su alianza con Volkswagen.
Finalmente, Suzuki ha logrado su objetivo, recuperando así el grueso de acciones que poseía Volkswagen y dando por finalizada una alianza que nunca llegó a buen puerto.